Nutriólogo Especialista en
Enfermedades Hepáticas en Monterrey

Mejora tu salud hepática con un plan alimenticio
basado en tus estudios y composición corporal

enfermedades hepáticas

¿Tienes hígado graso o cirrosis? Un tratamiento nutricional adecuado puede ayudarte a frenar el daño, reducir la inflamación y mejorar tus niveles clínicos. Recibe atención especializada y seguimiento profesional con un nutriólogo especialista en enfermedades hepáticas en Monterrey, enfocado en tu bienestar ingeral.

¿Qué puedes esperar en tu consulta
con un Nutriólogo Hepático en Monterrey?

Tu consulta con un nutriólogo especialista en enfermedades hepáticas en Monterrey va más allá de una dieta general Es una valoración completa donde revisamos tus estudios, síntomas y hábitos diarios para crear un plan alimenticio que se adapte a t, cuide tu  hígado y mejore tu bienestar real..

Durante la cita:

¿Que incluye tu plan de nutrición
para enfermedades hepáticas?

El plan que recibirás está 100% personalizado, diseñado por un nutriólogo especialista en enfermedades hepáticas, con base en tu diagnóstico y objetos.

Incluye:

Beneficios de agendar tu consulta con un
nutriólogo experto en enfermedades hepáticas

Si te han dicho que tienes hígado graso o cirrosis, sabes que no basta con “comer sano”. Necesitas una guía clara, cercana y adaptada a ti. Al agendar tu consulta, recibirás atención de un nutriologo especialista en enfermedades hepáticas que entiende tu situación y te acompaña paso a paso.

Con un plan nutricional personalizado podrás:

¿Por que confiar tu salud a un
nutriólogo especialista en enfermedades hepáticas?

Por que tratar enfermedades del hígado requiere algo más que evitar alimentos grasosos Un nutriólogo especialista en enfermedades hepáticas está capacitado para:

📊Dato:

El tratamiento nutricional adecuado puede reducir la grasa hepática hasta un 30% en los primeros  3 meses, según estudios clínicos recientes.

Preguntas frecuentes sobre
nutrición para enfermedades hepáticas

¿Cuómo saber si tengo hígado graso?

El hígado graso muchas veces no da síntomas, pero algunas personas sienten cansancio, pesadez abdominal o malestar en la parte derecha del abdomen. Es más común en personas con sobrepeso, diabetes o colesterol alto. Para saberlo con certeza, se necesita un ultrasonido y/o análisis de sangre. Detectarlo a tiempo es importante para evitar que el hígado se dañe más.

Para ayudar al hígado a recuperarse, existen algunos alimentos clave como: Verduras en cantidad abundante (brócolo, espinaca, calabaza), frutas frescas, granos integrales (avena arroz integral, quinoa), proteinas magras (pollo sin piel, pescado, claras de huevo), grasas buenas (aguacate, aceite de oliva, nueces) y agua natural (evitar refrescos y jugos).

Se deben evitar: alimentos ultra procesados, frituras, pan dulce, embutidos, refrescos y alcohol.

La desnutrición es considerada cuando el cuerpo no recibe suficientes nutrientes como proteínas, vitaminas o calorías, ya sea por una mala alimentación, enfermedades o problemas para absorber los alimentos. Esto puede causar pérdida de peso, debilidad, baja de defensas y afectar la recuperación de otras enfermedades. Detectarla y tratarla a tiempo es clave para mejorar tu salud y calidad de vida.

El hígado graso puede mejorar en pocas semanas a varios meses, si se hacen cambios en la alimentación, se baja de peso (específicamente de grasa visceral) y se evita el alcohol. En casos leves, puede revertirse en 3 a 6 meses. Si hay inflamación o daño avanzado, puede tardar más tiempo y necesitar tratamiento médico-nutricional. Lo importante es seguir un plan constante y saludable.

La cirrosis hepática no tiene cura, ya que el daño al hígado es permanente. Sin embargo, con tratamiento y buenos cuidados, se puede frenar su avance y evitar complicaciones. Es fundamental seguir un plan de alimentación adecuado proporcionado por un nutriólogo clínico y evitar el alcohol. En casos graves, el transpalante de hígado puede ser una opción.

El hígado se puede dañar por el consumo de alcohol, medicamentos mal usados (como paracetamol en exceso), algunos productos “naturales” sin control médico y sustancias tóxicas del ambiente. También lo afecta una mala alimentación rica en grasas, azúcares y alimentos procesados. Estas sustancias pueden provocar inflamación o daño crónico si no se controlan

Agenda tu cita y mejora tu salud hepática

Para empezar tu tratamiento nutricional  y transformar tu salud hepático:

Mejora tu calidad de vida con el acompañamiento de un nutriólogo especialista en enfermedades hepáticas. Tu hígado puede sanar con el plan correcto.